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LOS MUERTOS DEL POLVO

viernes, 19 de octubre de 2007
Hoy cuando las esperanzas parecen agotadas, donde pudieron más los intereses políticos y económicos que el futuro de la humanidad, se ven los nefastos resultados que tenemos que afrontar hoy, por no cuidar lo que se nos dio, un verdadero paraíso que no supimos cuidar, atacando a diario un indefenso y frágil sistema que nos proporcionó la vida.
Yo me encuentro en unas de las naves, que después de tanta búsqueda, los científicos, encontraron la manera, parecido a un cuento de ficción, poder trasladar a seres humanos aptos, aunque con nosotros viajaran las semillas que alguna vez se prestaron para la destrucción, a un nuevo planeta un nuevo mundo, como dioses o animales de laboratorio para la continuidad de la humanidad, además de otros seres y plantas, muy parecida a la historia del Arca de Noé, así se llama esta nave. Pero en realidad, esta no es la historia, solo espero que alguien algún día, la lea y reflexione en cuanto a esto, y lo que tuve que ver y vivir, si no hubiese sido porque trabajo en este proyecto, hoy no podría contarlo. Dos planetas rojos dejamos en este sistema solar.
Nunca conocí el cielo azul, del que tanto hablaban papá y mamá en sus cuentos, tampoco mares azules verdosos, ni estrellas que tiritaban en el cielo para hacernos soñar, como ellos contaban, desde siempre recuerdo un cielo de color rojizo; algo parecido a una hermosa aura boreal que aterraba a la mayoría de las personas, y todos decían, hoy esta mas alto que nunca el U.V. (ultra violeta),radiación ultra violeta que no tenia quien detuviera su paso silencioso y devastador, aun recuerdo las incontables veces, que tuvimos que mudarnos a tierras altas, éramos nómadas obligados, olvidar todo lo que dejábamos atrás, ya estábamos acostumbrados; el mar cada día cobraba mas terreno todo por el deshielo de los casquetes polares, no existía transmisión radioeléctrica en las radios y televisores lo que se escuchaba era ruido. Poco a poco vi desaparecer animales y las plantas que nos rodeaban, todo era un desierto, de color rojizo, polvoriento, habían días en que no se podía casi respirar, el calor del día secaba rápidamente nuestras gargantas y las noches, olas de aire cálido en contraste con bajas temperaturas que helaban los huesos, El gobierno supremo nos proveía de agua y algunos alimentos sintéticos; mis padres se fueron temprano, cuando aun no tenían cincuenta años, mi padre murió de cáncer de piel y ceguera total, mi madre de igual manera, mi padre siempre hacia una cita, decía que el hombre había leído muy bien la Biblia, lamentablemente las ultimas paginas, las del Apocalipsis; a veces pienso que es lo mejor que les pudo pasar, no hubiesen podido viajar conmigo ….……me costaba recordar la sonrisa de mis padres, vivimos mucho tiempo usando lentes de sol y mascaras de carbón activado para subsistir, se me permitía visitarlos una vez cada mes, si estábamos adelantados en el proyecto, cuando regresaba al laboratorio, sentía en mi, el sabor de la muerte, sabia que en algún momento no los encontraría ……….Era pavoroso ver como una procesión de personas con las caras cubiertas y ojos de chacal, con los sentidos nublados, llamados los muertos del polvo, andaban tras un ser moribundo esperando solo que se desplomara agotado de enfermedad y largara su ultimo aliento, para luego ser cortado en pedazos como animal de caza, fieras hambrientas sin ningún sentimiento de culpa, se había creado hasta una ley absurda, en la cual contemplaba que no podía ni debía ser beneficiado ningún ser humano hasta que soltara su ultimo aliento y el que lo hiciera seria beneficiado de igual manera, la vida para muchos no tenia ningún valor, solo el de la supervivencia , la ley del mas fuerte.
Los temblores de tierra eran algo cotidiano, escapes de materia sulfurosa se desplazaban como buscando a quien abrazar, se podían ver abismos tan profundos, que daban la idea de no tener fondo, sectores inmensos separados por estos abismos de kilómetros y kilómetros de longitud cada día separaban mas a unos de los otros, el mar se adentraba en las entrañas de esta tierra comiendo montañas tratando de limpiar lo que el hombre había hecho, pero ya era tarde muy tarde, para dar vuelta atrás. Cuantas pruebas nucleares hicieron falta, ideas psicóticas sobre guerras espaciales, fabricas de cloro, contaminantes de hidrocarburos, desechos nucleares, fueron rasgando poco a poco, ese gran manto celestial que nos protegía, solo mirábamos al cielo para quejarnos del caluroso sol, de que valieron tantas marchas, tantas propagandas, protestas.
+++ diez años reportaron las sondas exploradoras………un camino incierto………cuanto nos costara construir una nueva sociedad.

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